“¿Qué onda con esta capacitación?”

Algo que muchos de nosotros nos hemos preguntado durante una de las extensas sesiones de capacitación que hemos recibido en nuestro trabajo es: ¿Qué onda con esta capacitación?.

Cuando comenzaba como capacitador jr. -hace ya varios años- me tocaba escuchar constantemente que los trabajadores decían que las capacitaciones eran aburridas, que no les eran útiles o que ellos consideraban que para empezar ni siquiera debían estar ahí. Al principio no comprendía la razón de estos comentarios, sin embargo, con el tiempo me di cuenta que el proceso de capacitación no se llevaba de manera adecuada, lo cual afectaba los resultados obtenidos. Además, tanto la empresa como los empleados que la recibían, estaban perdiendo tiempo y recursos.

Muchas personas piensan que brindar una capacitación consiste en elaborar una presentación con diapositivas y exponerla frente a un grupo, el cual suponen que necesita escucharla. Esto no es así.

Un correcto proceso de capacitación debería considerar diversas etapas, por ejemplo:
1.- Analizar las necesidades que tiene la empresa, identificando en que se puede mejorar.
2.- Realizar evaluaciones que nos permitan identificar nuestro punto de partida y definir las características de la situación con la que tendremos que trabajar.
3.- Establecer los objetivos de la capacitación y definir a qué personas estará dirigida.
4.- Diseñar la intervención, seleccionando las técnicas y materiales adecuados. No todo es usar diapositivas.
5.- Realizar el entrenamiento priorizando los horarios que favorezcan a los colaboradores, aprovechando el tiempo al máximo y asegurando la calidad de los contenidos.
6.- Finalmente debemos analizar el impacto de nuestra intervención, midiendo los efectos en diferentes niveles.

Si aseguramos este proceso conseguiremos entonces que nuestra capacitación sea un éxito. Y de este modo la empresa y los colaboradores obtendrían los frutos de la inversión.

Cuéntanos tu opinión y experiencia sobre las capacitaciones, con gusto las leeremos.